Las manualidades nos gustan, pero también los juegos educativos, si además podemos aunar ambas opciones, mejor que mejor. Hoy os proponemos una manualidad muy fresquita para el verano; y es que se trata de un juego de parejas con helados. Tranquilos, no vamos a pringarnos, no más de lo necesario.
Los juegos de parejas
Los juegos de parejas son una actividad muy divertida para los pequeños, pero, además, también ponen en práctica cosas tan importantes como la memoria visual de los niños. Desde edades tempranas son capaces de memorizar determinados colores y patrones. Además, al ser actividades divertidas, por un lado estamos reforzando esta capacidad de memorizar al mismo tiempo que estamos jugando.
Qué necesitamos para la manualidad
Necesitaremos tijeras, cartulina, pinturas y los típicos palos de helado. Por otro lado, si queremos, también podemos decorar nuestros helados con pegatinas o haciendo divertidas composiciones con otros materiales como cartulinas de colores. Miremos un poco lo que tenemos en casa y así no tendremos que gastar más de la cuenta. Seguro que tenemos todo lo que necesitamos sin problema.
Paso a paso
Lo más importante es que los helados tengan el mismo tamaño y que por la parte trasera sean todos iguales. Para ello, tomaremos una cartulina de un mismo color y cortaremos paletas de helado de las mismas dimensiones. Que encajen todas una encima de otra y que no se vean más grandes o más pequeñas.
Una vez tengamos los helados cortados, podemos empezar a decorarlos. Podemos, como hemos comentado, dibujar en ellos, creando bonitos helados con fruta o con colores llamativos. También podemos pegar pegatinas. Hay un montón de stickers que encontraremos en tiendas de papelería que podrían venirnos bien. Asimismo, si lo preferimos, podemos pegar otros papeles encima para hacer un divertido collage. Lo primordial es que tengamos dos de cada, pues el juego es precisamente poder descubrir las parejas cuando estén todos los helados bocabajo.
Si ya tenemos todos nuestros helados terminados, es momento de pegarlos a las paletas de helado de madera. Un pegamento suave será más que suficiente, pues no son materiales pesados.
Deja que se sequen y prepárate para jugar con los peques. No hay nada más divertido que experimentar con sus propias creaciones. Además, podemos guardar estos helados en tarros como el que vemos, creando así un elemento decorativo para cualquier estantería de la casa.
Imágenes vía: pequeocio