La pared en la que colocamos la cama, ya sea en un dormitorio adulto o en un dormitorio infantil, cuenta con gran importancia. Hay un sinfín de opciones si hablamos del universo infantil, no sólo para cabeceros, también para decorar esta parte de la estancia. Recopilo unas cuantas que me han parecido muy pero que muy interesantes. Ideas diferentes que dan alegría a la habitación de nuestros hijos, en una pared que, sin duda, es esencial para el descanso.
Un cabecero infantil muy original con forma de nube
No es la única forma divertida que puedes encontrar en cabeceros de cama infantil. No obstante, no he podido resistir escoger esta imagen para hablaros de los cabeceros con diferentes formas. Parece adecuado, pues una nube puede alargarse tanto como la cama de nuestros hijos demande. Un cabecero diferente que nos traslada al cielo. Colores muchos, pero el blanco, sin lugar a dudas, otorga una paz extra en un rincón en el que precisamente descansar es lo importante.
Un cabecero casita para niños…¡A refugiarse!
Encantadores son también los cabeceros con forma de casita. Los estamos viendo muchísimo en un sinfín de revistas y páginas de decoración. Tienen ese aire nórdico que nos vuelve locos. En madera natural aportan calidez, pero si quieres seguir la paleta de color de la habitación infantil, no habrá problema alguno en pintarlos. Un espacio reservado que traslada los juegos y la magia a la cama de tu hijo.
Tablas de madera: Cabeceros con aire DIY
Las tablas de madera pueden ser de ayuda en las habitaciones más cálidas. Fijaos en este ejemplo, una excelente opción DIY para panelar la pared de la cama. Creas un espacio limitado que arropará a tu hijo por la noche. El resto de la pared, como ves, puedes aprovecharla para colocar cualquier elemento decorativo; y es que la madera pega con todo.
Pizarras para un cabecero nuevo todas las noches
Una idea estupenda es la de pintar la pared del cabecero de cama con pintura pizarra. De esa forma, todas las noches, tus hijos tendrán un cabecero diferente. Haz que su imaginación explote como una gran piñata y deja que el pequeño artista que lleva dentro decore su propia habitación.
Papeles pintados con mil colores
Los papeles pintados infantiles son una verdadera maravilla. Encontramos tantos modelos como queramos. Así, nuestros hijos pueden escoger aquellos papeles que más se ajusten a su personalidad. Los coloridos, además, dan un giro total a la decoración de la habitación infantil. Un consejo, con esto de los colores y papeles pintados mejor seguir el menos, es más. Reserva una pared, por ejemplo, la del cabecero de cama. El resto de la estancia puedes pintarla en blanco o en algún tono complementario a los colores del papel pintado. De esta forma te aseguras no saturar la habitación de tu hijo.
Pared a dos colores
Y si quieres una idea sencilla y económica, crea diferencia con la pintura. Puedes, por ejemplo, pintar la pared del cabecero de cama a dos colores. Reserva la parte superior para el blanco, para dar mayor iluminación natural a la habitación, y la parte inferior al color que escojas. Crearás un cabecero fijo sin necesidad de recurrir a madera, papeles pintados y otras opciones que igual son más caras.
