Una habitación para el bebé y para los padres. Una habitación bonita y cómoda a partes iguales. Es posible y es necesario; y es que durante los primeros meses, no sólo queremos un entorno agradable, también tranquilo y cómodo. Te traemos este precioso ejemplo de la firma Mamka que siempre sabe crear espacios de lo más inspiradores.

Comodidad para niño y para padres

Tanto si optamos por lactancia materna, como si optamos por lactancia artificial, vamos a pasar muchas horas alimentando a nuestro bebé, también por las noches. Esto hace que a la hora de decorar la habitación del bebé tengamos un objetivo: un lugar ideal para el niño, pero que también sea acogedor y cómodo para los padres.

Los sillones de lactancia son, para este fin, lo más adecuado. Un gran sillón como el que vemos en esta estancia. Un sillón tapizado en tela gris que se convierte en el rincón más acogedor para los adultos, pero también para los bebés; y es que es aquí dónde se alimentarán durante varias tomas al día.

Vemos un sillón de amplios reposabrazos, algo imprescindible en estos muebles de lactancia, y con un relleno suave que garantizará el descanso. Además, este sillón no tiene necesariamente que usarse sólo para la lactancia, posteriormente se puede usar para leer con el bebé o simplemente para descansar nosotros mientras el niño duerme.

Un sillón de estas características, además, también es ideal para dormir a los pequeños por la noche o para mecerlos cuando se despiertan. Este modelo en concreto cuenta con un taburete con un respaldo muy original con forma de alas de mariposa.

Una cuna protectora

El modelo de cuna escogido es muy interesante. Una cuna ovalada con paredes acolchadas que será muy protectora para el pequeño, asegurando un sueño seguro y profundo. Cuenta con respaldos y barreras lo suficientemente altas para que el niño no se caiga, además de estar diseñada para evitar lesiones y contusiones varias.

La cómoda de madera

Nos gusta muchísimo la cómoda de madera que podemos apreciar en esta habitación. Una cómoda con cierto aspecto rústico y natural. Esta cómoda, que además funciona como cambiador, cuenta con esquinas redondeadas. Esto no sólo es bueno para nosotros, también para el peque a medida que crezca; y es que ninguno de nosotros tendrá desagradables magulladuras o golpes accidentales al pasar o al jugar cerca.

En cuanto al espacio, seis cajones son suficientes para guardar los artículos para el bebé. Seis cajones que serán ideales para guardar pañales, biberones, muselinas, chupetes, productos de aseo y pequeñas prendas de ropa.

Un armario a medida

Nos queda una pared, además de la pared de la ventana, precisamente la que está frente a esta. Esta pared está aprovechada con un mueble a medida. Un armario con baldas que es ideal para poder guardar la ropa del bebé. En los estantes, además, podemos incluir desde juguetes hasta libros.

La forma del armario deja un nicho central que, además, puede llenarse de almohadas para convertirse en un espacio de juegos para el futuro.