Según el Feng Shui, ese arte milenario chino basado en el diseño de espacio para mejorar la calidad de vida, la habitación del bebé tiene que transmitir seguridad. Sí, seguridad para el niño, pero también para los padres. La tranquilidad hace del hogar un lugar más estable. Así, protectores, tejidos naturales, cantos rodados y demás, serán necesarios, sobre todo cuando se trata del primer hijo y tenemos una habitación disponible para poder empezar de cero. Una habitación que podremos decorar desde el minuto cero y que se convertirá en el lugar en el que crezca tu bebé.
Aspectos generales del feng shui para bebés
El Feng Shui es amplio, y muchas veces es complicado aplicarlo en casa. En lo que respecta a la habitación del bebé, la iluminación ideal es la iluminación natural. Se suele decir que si tienes una planta y la pones al sol, donde le llega la luz, esta crece, florece y se ve hermosa. Pero si la ubicas en un área oscura y poco ventilada, se marchitará. Eso mismo sucede con las personas; si estás en una zona que no te resulta agradable, tú no vas a estar bien. Ahora bien, aunque la luz es importante, también lo son las cortinas. Este elemento controlará la cantidad de luz que recibe el bebé.
En cuanto a los colores, cuando el bebé es muy pequeño es recomendable usar colores muy claritos. El blanco sería ideal, aunque no hay problema en usar tonos pastel, por ejemplo. Independientemente de los colores que escojamos para la pared, podríamos considerar pintar el techo de un azul muy pálido. Este color recreará el cielo y hará que la habitación se vea mucho más espaciosa.
Decoración Feng Shui para el bebé
Los tapices y cuadros alegres, con motivos varios como animalitos, niños o incluso payasos, transmiten una atmósfera de convivencia. Asimismo, la limpieza y el orden es siempre esencial en una habitación Feng Shui, también en la del bebé. Esto es importante para que el aire y la energía circulen bien, sin barreras. Además, también lo hará la luz, creando así un ambiente de mayor tranquilidad y sosiego.
No es bueno llenar la habitación de juguetes y peluches. Estos objetos quitan mucha energía a nuestro bebé. Intenta que todos sus juguetes estén guardados en armarios o cajas. Deja alguno para decorar pero no en exceso.
Decoración que se adapta al bebé
Una idea muy interesante es comprar el primer mobiliario del bebé en blanco. También puedes elegir paredes y cortinas neutras. De esta forma, a medida que el pequeño crezca, se podrá ir configurando una habitación más personal con lámparas, alfombras y textiles. Cuando el niño sea capaz de elegir sus gustos personales, se podrá escoger un tema, cambiar el edredón, las lámparas y adornos, pero al tener un ambiente neutros (muebles y paredes) el cambio será posible sin necesidad de invertir demasiado.
Cómo elegir la cuna y dónde ponerla
La cuna ideal, según el Feng Shui, tiene que ser de madera. La madera es un material natural que al mantener contacto con la tierra permite un mayor tránsito de energía.
Sitúa eta cuna en las zonas más tranquilas de la habitación. Debes colocarla lo más lejos posible de la puerta, un lugar en el que notes que está más protegido. Sí, tampoco es buena idea colocar la cuna debajo de una ventana o una viga. Al final se trata de seguir un poco nuestro instinto.
Qué cosas debo evitar en la habitación del bebé según el Feng Shui
El Feng Shui puede ser complicado, como hemos comentado, pero tiene muy claro las cosas que no deberíamos tener en la habitación de un bebé. Por ejemplo, no es recomendable tener aparatos eléctricos, no, ni reproductores de música. Ya sabemos que algunos son indispensables, pero hay que intentar limitar el número. Si los colocas, que estén lo más lejos posible de la cuna, pues crean una energía electromagnética que podría interferir en el sueño del bebé.
No coloques espejos, atrapan la energía. Si quieres colocar uno, por lo menos evita que esté ubicado frente a la cuna del bebé. Asimismo, evita poner plantas cerca del lugar en el que tu hijo dormirá.
Imágenes vía: interiorputry,miniundstil, Homedecostar,mi-kiki,