El ambiente que os traemos hoy es una verdadera preciosidad. Se trata de un trabajo hecho por el equipo de Hana Lerner Arquitectura. Un dormitorio en el que la madera es la protagonista absoluta en los materiales, pero que, además, mezcla un sinfín decolores y espacio dinámico para que los peques puedan disfrutar de todo su tiempo de ocio.
Aprovechar todo el espacio
Independientemente de los materiales y el color, la elección de cama elevada nos parece de lo más interesante. La habitación es grande, no necesitaría esta solución para ganar espacio, pero aún así lo hacen. De esta forma, no sólo se cuenta con un rincón para jugar, otro rincón para estudiar y un rincón en las alturas para dormir. También se añade un espacio extra para el juego que convierte la habitación en un ambiente diáfano en el que se pueden hacer un sinfín de cosas. Sin duda un acierto, pues, además, hablamos de una habitación muy iluminada que permite un juego en tierra lleno de luz.
Una zona improvisada para leer
Lo que nos gustan de estas estructuras es que la parte inferior, además de ser un lugar en el que poder jugar, puede transformarse fácilmente en una zona de lectura. En este caso nos parece bastante adecuado; y es que, como comentábamos, la luz que entra directamente de esos amplios ventanales hace que ese espacio inferior sea ideal para disfrutar de un buen libro. Sea como sea, si queremos usar estas estructuras de camas en alto, cerciorémonos siempre de que son seguras y están homologadas. Que pasen todos los controles de seguridad, que al final es lo importante. En la parte inferior podemos colocar un montón de cojines, como en la foto, para que nuestros hijos se tumben y disfruten del apasionante mundo de la lectura.
Un papel pintado que destaca
El papel pintado no nos puede gustar más. Siempre hemos pensado que el verde queda espectacular con la madera. Además, no podemos negar que los papeles pintados con motivos geométricos son tendencia. Siguen siéndolo desde hace mucho tiempo. Una manera de introducir color en una habitación en la que reina la madera.
El uso del color
Nos encanta el uso del color, algo que hemos señalado desde el principio. Lo cierto es que esta habitación nos puede dar un ejemplo perfecto de cómo podemos integrar un sinfín de colores sin recargar la habitación. El secreto, como hemos ido adelantando, está precisamente en utilizar un mismo material protagonista y un color principal. Con eso, podremos comenzar a salpicar las paredes y ciertas zonas con infinidad de colores. Intentemos que las piezas más grandes, como la alfombra o las cortinas, cuenten con un tono neutro y dejemos los colore estridentes para pequeñas piezas decorativas.
Un armario y vestidor
Para terminar, nos fijamos en el enorme armario empotrado de la habitación. Es importante tener almacenaje, y en este dormitorio infantil lo cumplen. Aún así, también es importante que la autonomía de nuestros hijos se trabaje desde pequeños. Por este motivo, nos parece muy acertado el uso de ese pequeño burro para colgar diferentes prendas de ropa. Una opción para que nuestros hijos preparen su atuendo de toda la semana ellos mismos.