La lucha diaria para que nuestros hijos coman un poco más de verduras puede terminar si incluimos en su dieta recetas más atractivas como estas patatas rellenas de pollo, brócoli y queso. Se trata de una receta deliciosa con ingredientes que gustan mucho a los peques, pero además, también es muy nutritiva. Un nuevo intento por hacer más apetecible la verdura a nuestros hijos que, además, también puede gustarnos a nosotros ¿qué puede salir mal?
Ingredientes para esta receta infantil
- 4 patatas grandes
- 1 brócoli
- ¼ cucharadita de sal
- ⅛ cucharadita de pimienta negra
- Pechugas de pollo
- 2 cucharadas de mantequilla sin sal
- Pimentón
- 2 cucharadas de harina
- 1 ½ tazas de leche
- 1 taza de queso rallado
Paso a paso de esta receta infantil de verdura
Lo primero que haremos será precalentar el horno a unos 200º. Cubre ligeramente las patatas con aceite de oliva y espolvorea un poco de sal y pimienta. Pincha las patatas con los dientes de un tenedor unas cuatro veces para que se hagan mejor por dentro. Colócalas en una bandeja para hornear y hornea durante unos 60 minutos. Cuando lleven unos 40 minutos, voltea hasta que la piel esté crujiente. Para probar, introduce un cuchillo. Cuando entre sin problemas, estarán hechas.
Mientras las patatas se hacen, puedes ir preparando el pollo. Primero sazona con sal, pimienta y pimentón. Luego calienta una sartén y añade aceite. Agrega las pechugas y deja que se cocinen hasta quedar dorada y hechas por dentro. Después de cocinar, reserva en un plato hasta que se enfríen.
Una vez estén frías las pechugas, deberás cortarlas a cubos muy pequeñitos. Otra opción es deshilacharlas.
Es momento de hacer nuestra salsa de queso. Para ello, derrite mantequilla en una cacerola a fuego medio. Cuando esté espumosa, agrega la harina y bate bien para que se forme una pasta beige. Luego deja cocinar por 1 o 2 minutos con cuidado de que no se queme.
Será el momento de ir agregando la leche y batir para que se mezcle. Aumenta el fuego a alto y hierve la mezcla sin dejar de batir. Después, reduce el fuego y cocina unos 8 minutos o hasta que la salsa esté espesa.
Ahora toca agregar sal, pimienta y mezclar mientras agregamos lentamente el queso para que se derrita. Cuanto más queso, más fuerte, pero lo cierto es que quedará más delicioso.
Toma ahora una cacerola mediana que tenga tapa y llénala con un dedo de agua. Coloca un vaporizador dentro y lleva el agua a ebullición. Después, coloca el brócoli en la vaporera y cubre. Si cuentas con otra herramienta para poder hacer tu brócoli al vapor, será bienvenida. Recuerda que así cocinado no sólo está más blandito, también es saludable.
Una vez notes que el brócoli está tierno, transfiere a un tazón y sazona con sal y pimienta al gusto.
Tenemos todos nuestros ingredientes listos, por lo que es el momento del montaje de nuestras patatas.
Corta las patatas horneadas de forma que se cree una apertura en el medio. Esta apertura será la que usemos para rellenar con el resto de ingredientes. Usa un tenedor para esponjar el interior para que pueda quedar más esponjoso y suave y rellena con la salsa de queso, con el pollo en cubitos y con el brócoli.
Os decimos desde ya que es una receta que va a encantar a los peques, pero que también es una de esas recetas que podemos comer nosotros mismos sin problema porque es altamente nutritiva y tiene un sabor delicioso. A partir de ahora el brócoli no será un alimento prohibido para nuestro peques ni muchísimo menos.
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