El verano tiene tantas horas de sol, que nos parece ridículo no aprovecharlas para hacer una manualidad que es, a su vez, un gran experimento para los niños. Seguro que si le preguntas a tus hijos sobre los relojes solares, muchos no saben cómo funcionan, sobre todo cuando son muy pequeños y aún no están muy familiarizados con el tiempo. Hoy os vamos a enseñar a hacer un reloj solar DIY que no sólo os ocupará un rato agradable con vuestros hijos, también os servirá para que ellos mismos puedan empezar a experimentar con los movimientos de la tierra y el sol.

Materiales

  • Plato desechable de cartón.
  • Pintura de color (cualquiera sirve).
  • Un lápiz.
  • Pegamento líquido.
  • Tijeras.
  • Pincel.
  • Este reloj impreso.

Paso a paso

Lo cierto es que la manualidad en sí es muy sencilla. Tan sólo tenemos que tomar el plato y pintar todos los bordes con ayuda del pincel y esa pintura que hemos escogido. No es necesario pintar el centro, pues es donde pegaremos la impresión de nuestro reloj en papel.

Descarga la plantilla del enlace e imprímela. Recorta bien con unas tijeras.

Una vez recortada, deberás pegarla en el centro del plato.

Con ayuda de las tijeras, haz un hueco en el centro del papel y del plato de cartón. Ese hueco será el lugar en el que tengas que introducir el lápiz. Para fijarlo, coloca pegamento líquido en los bordes del hueco y luego mete el lápiz sujetándolo hasta que quede de pie.

Ya lo tienes. Este es vuestro reloj solar y sí, funciona. Sólo necesitas salir a la calle para probarlo. Ahora bien, en estos momentos lo que tienes que hacer es explicar bien qué ocurre y por qué.

Una buena explicación

Podemos explicar a nuestros hijos que el funcionamiento de este tipo de relojes es muy sencillo, pero al mismo tiempo interesante. La varilla que proyecta la sombra es la encargada de marcar las horas.

A nuestros ojos, el sol es el que se mueve a lo largo del día, pero lo cierto es que no, no es el sol, es la tierra la que gira alrededor de este astro rey. Pero además de este movimiento alrededor del sol, que es el que genera las estaciones, la tierra también se mueve sobre su propio eje. Es este último el que nos interesa en esto de los relojes solares.

Nuestro planeta, el planeta tierra, gira sobre su eje a una velocidad de 460 metros por segundo. El resultado de este movimiento y esta velocidad es que la sombra del lápiz se mueve quince grados aproximadamente cada hora hasta que finalmente completa el giro completo en 360 grados.

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