Hoy os traemos un espacio que nos ha robado completamente el corazón. Se trata de una zona de juegos muy especial. La hemos encontrado en la cuenta @steph.soj, que ya de por sí es una fuente de inspiración increíble. No obstante, además de imágenes varias sobre el estilo de vida de esta familia, nos encontramos con un espacio multifuncional ENORME en el que los niños pueden jugar. Sí, es cierto que no todos tenemos una habitación tan grande para dedicarla en exclusiva a esto. Pero en el caso de que así sea, puede ser un modelo a seguir.
Un espacio amplio
La amplitud del espacio es lo que más nos gusta. Ya hemos comentado que no todos contamos con esos metros. No obstante, cualquier habitación de juegos podría seguir el esquema. Como vemos, es sencillo. Se trata de dejar el centro vacío y retirar los distintos elementos de juego en las paredes. Así, no necesitamos decoración en ellas, simplemente sirven como almacenaje para que el centro de la estancia esté libre para cualquier juego.
Un suelo agradable
Una de las cosas más importantes en una habitación de juego es, sin lugar a dudas, el suelo. Sabemos que las baldosas pueden ser frías, y también que los niños van a querer estar siempre en el suelo jugando, a no ser que estén pintando y hay veces que ni por esas. Por tanto, las soluciones pasan por colocar una alfombra (en esta sala podemos ver una al final) y un suelo cálido. El suelo de madera es, sin duda, el más cálido de todos. No obstante, los suelos de madera sintética también pueden ser apropiados para esta estancia; y es que, aunque no son tan cálidos como la madera natural, tampoco son tan fríos como un azulejo o mármol, por ejemplo.
Luz por todas partes
La iluminación es ESENCIAL en una habitación de juego. En este caso, siendo una vivienda unifamiliar, lo tienen más sencillo. No obstante, si estás pensando en crear una habitación de juego en tu casa, intenta escoger aquella que cuente con mayor iluminación durante el día. La orientación, para ello, es esencial. Piensa que los peques cuando juegan es de día, quizá más por la tarde. Así, intenta encontrar la habitación que esté mejor orientada a esas horas.
Un rincón para cada cosa
Como comentábamos, este ejemplo es perfecto; y es que cuenta con un rincón para cada cosa. Vemos un espacio para dibujar, con sus mesitas. Retirado del centro. No obstante, se podrían mover en cualquier momento al centro.
Además, también tienen diferentes mesas para construcciones varias e incluso un puesto de mercado para que los peques puedan disfrutar jugando a las tiendecitas. Y sí, llama la atención el uso de la madera en la mayoría de los juguetes. Algo que sin duda también nos gusta; y es que no hay nada como los juguetes más tradicionales para despertar la imaginación de los pequeños.
Imágenes vía: @steph.soj
