Las habitaciones abuhardilladas cuentan con ese encanto especial que sólo estos espacios pueden dar. Esos techos inclinados, que crean ambientes acogedores, como mágicos. Sin duda es un lugar muy interesante para ubicar la habitación infantil. No obstante, hay que tener en cuenta que las buhardillas cuentan con limitaciones espaciales. Son estancias con particularidades que deben ser tratados de forma especial. Hoy os mostramos un precioso ejemplo, Una habitación infantil abuhardillada muy bien aprovechada que nos trae directamente la decoradora @chloecornu_architecture.

Aprovechar bien el espacio

Teniendo en cuenta la estructura y disposición de una buhardilla, se hace necesario estudiar bien dónde colocar cada elemento del dormitorio para niños. Ten en cuenta que en una buhardilla vamos a encontrar, como mínimo, un lado en el que el techo es más bajo. En este caso, la decoradora se encontró con dos paredes inclinadas que debían ser estudiadas al máximo.

La solución nos gusta, y mucho. Se trata de utilizar cada lado para las zonas en las que los pequeños están tumbados. Por un lado podemos encontrar una cama, encajada además dentro de la pared. Una cama escondida que hace que esté aislada del resto de la habitación. De esta forma, lo que queda de superficie puede usarse fácilmente como una zona de juegos única.

Por otro lado, en la otra zona con techo inclinado, se habilita una zona de lectura. Sin duda una excelente opción; y es que así los niños no tendrán problema a la hora de andar con un techo bajo.

Los materiales escogidos en la habitación abuhardillada

Debemos hacer también revisión de los materiales que se han escogido en este dormitorio abuhardillado; y es que nos parecen un acierto total.

Por un lado se ha dejado las vigas de madera al aire, algo que da un toque mucho más acogedor a un espacio en el que el blanco está muy presente. Fíjate que se ha respetado esta madera en las partes más inclinadas, algo que hace el ambiente aún más interasnte.

Además, también es necesario destacar la moqueta. Sí, ya sabemos que no todos aprecian este material, pero hay que resaltar que las moquetas actuales no tienen nada que ver con las de antes. Muchas cuentan con tratamientos especiales que hacen que se acumule menos polvo y que incluso repelan los líquidos. Además, no podemos negar que como superficie par aque nuestros hijos jueguen es muy interesante. Sí, la moqueta puede ser un excelente pavimento para una habitación de juegos infantil.

El papel pintado también está presente para dar profundidad a la estancia. Nos gusta; y es que ya sabéis que en decopeques somos muy fans de los papeles pintados infantiles.

La paleta de colores

En la paleta de colores hay dos colores neutros que funcionan como una base clara, el gris de la moqueta y el blanco de las paredes. Teniendo en cuenta estos colores, es posible incluir después un montón de tonalidades diferentes. No obstante, en este caso la importante es el rosa pastel. El rosa pastel aparece en el rodapié y en la estructura de la cama, también en la cortina de la zona de lectura.

Este rosa pastel da ya color, pero no lo suficiente. Así, se ha optado por colocar un papel pintado floral. Un papel pintado que da vida a una pared pero que también se extiende a una zona muy concreta de la estancia, la cama. Sí, en forma de cortina, este papel cubrirá esta pared cuando el niño no esté durmiendo. Una excelente idea para unificar el espacio y hacer la zona de juego más grande a los ojos del niño y de las visitas.

Imágenes vía: @chloecornu_architecture.