Hoy os traemos más imágenes que texto; y es que hay veces que una imagen sí vale más que mil palabras. Nos centraremos, pues, en el trabajo de Samantha Lee, una artista gastronómica malaya que nos demuestra día a día que cocinar para nuestros hijos puede ser muy pero que muy divertido.
Pasión por la comida y la crianza
Samantha Lee cuenta que nunca pensó en su día en llegar hasta donde ha llegado. Su reconocimiento como artista gastronómica es más que evidente, dada la gran cantidad de seguidores que tiene en todas sus redes sociales. ¿Su secreto? Inspirar a muchos padres a la hora de crear platos divertidos para sus hijos.
Ella tenía claro que su sueño era ser madre. Nunca fue ambiciosa. Sólo quería ser ama de casa, quedarse en su hogar y cuidar de sus hijos. Nunca pensó que cuidar de ellos con un tono divertido podría terminar convirtiéndole en toda una estrella en las redes.
Platos para inspirarse
¿Por qué nos gusta Samantha? Además, de lo evidente, tiene muchísimo talento, nos gusta porque es una de esas páginas (cualquiera de sus redes) en las que podemos inspirarnos para hacer platos a nuestros hijos. Ya sabemos que es complicado que coman ciertas cosas, como la verdura. Muchos no quieren ver la fruta ni en pintura y otros se niegan a comer pescado. ¿Qué pasa si ofrecemos comida de una forma divertida a nuestros hijos? Que quizá no se la coman toda, pero seguramente comerán mucho más que con otra presentación.
Inspírate en sus diseños y crea verdaderos cuadros gastronómicos con muy pocos ingredientes. Cocina saludable, además, para pequeños saludables en la que encontramos todos los nutrientes que necesitan para poder crecer fuertes y sanos. ¿Qué plato te gusta más de todos?
