Como madres y padres emprendedores, sabemos que conciliar el trabajo con la crianza es complicado. Cada minuto cuenta. Cada segundo es un segundo de productividad que debemos aprovechar al máximo. En esto hay muchos factores que pueden influir, evidentemente la buena organización y planificación, pero también tener un espacio bien equipado; y es que el mobiliario es clave a la hora de favorecer la productividad laboral.

Comodidad y ergonomía como clave

Si buscamos las principales claves por las que el mobiliario ofrece un impacto positivo en la productividad laboral, nos encontramos con la comodidad y la ergonomía; y es que, ante todo, una silla o una mesa de trabajo deben ser cómodas y ergonómicas. Si no lo son, no tendremos las condiciones óptimas para poder tener una jornada laboral sin dolores ni malas posturas, algo que se traducirá en incomodidad y ralentización del trabajo.

Uno de los aspectos más destacados es la ergonomía. Un buen ejemplo son los muebles de oficina Ofiprix en los que podemos encontrar diferentes tipos de mobiliario según la tarea a realizar. Por ejemplo, no será lo mismo una silla de oficina, en la que estaremos sentados muchas horas, que las sillas para una sala de reuniones o una sala de entrevistas.

Sillas ergonómicas y ajustables

Para que una silla sea considerada ergonómica, entre muchos otros aspectos, debe ser completamente ajustable. Además, debe contar con un apoyo total de nuestra espalda para que esta descanse durante toda la jornada.

Los elementos como respaldo, asiento o reposabrazos deberán ser ajustables y combinarse con un buen soporte lumbar que haga que la silla se adapte al a antropometría de cada persona.

¿Qué vamos a conseguir con todo esto? Prevenir los dolores de la zona lumbar y del cuello cuando pasamos muchas horas delante del ordenador.

Escritorios también adaptables

No es requisito imprescindible, pero debemos saber que también existen escritorios adaptables que son una verdadera innovación en lo que a ergonomía se refiere. Estos escritorios nos permiten cambiar la posición e ir alternando incluso en estar sentado y de pie. Es un mobiliario de oficina capaz de adaptarse a cualquier necesidad individual dependiendo del trabajo que desempeñemos.

Accesorios también ergonómicos y cómodos

Un lugar de trabajo, ya sea en una oficina o incluso un despacho en casa, también puede incorporar otros elementos para hacer que estemos más cómodos durante las horas de trabajo. Un buen ejemplo son los reposapiés ajustables, que nos permitirán mantener una postura totalmente adecuada para ayudar a disminuir la presión en la parte inferior de nuestras piernas.

Ventajas en la productividad

Los beneficios de invertir en muebles de oficina de calidad y ergonómicos son muchos. La durabilidad de este mobiliario, al ser de mayor calidad, es también mayor. No obstante, lo que más nos interesa es que son capaces de mejorar la productividad.

Esto es debido a que todos estos ejemplos de muebles reducen el cansancio y permiten mejorar la concentración en las tareas que se realizan durante el día. De esta forma, tendremos horas mucho más productivas.

La lógica nos dice que cuánto más cómodos estemos a la hora de realizar ciertas labores, más tiempo podremos pasar entregados a ellas sin tener que cambiar de actividad y postura.