No todos los niños son iguales. Los hay quienes disfrutan con las máquinas, montando y desmontando robots. Niños que viven por y para experimentar, quién sabe, futuros genios del mundo de la tecnología. Luego hay otros niños fanáticos de las típicas piezas de lego, construcciones que, además, compaginan por un gran amor por el deporte ¿Cómo conseguir habitaciones tan diferentes para dos niños así? Te traigo un ejemplo que me ha enamorado. Se trata de las habitaciones infantiles de una vivienda en Cracovia. Lo único que tienen en común es que, precisamente, se salen de lo común. Pues lo cierto es que están orientadas a personalidades muy diferentes.
De piezas de lego y deportes varios
¿Por qué tener un único hobby? Quizá tu hijo tenga varios. Pongamos las piezas y construcciones de lego y el deporte. Únelo todo en un ambiente como este. Colores sobrios como el gris o azul grisáceo se mezclan con llamativos amarillos. El ambiente lo permite, pues cuenta con una amplia ventana, en la que descansa, como no podía ser de otra forma, un gran escritorio.
Lo interesante (si es que se puede destacar algo en concreto sin desmerecer el resto), es la pared del cabeza, que, junto a la mesita de noche, hace un simpático guiño a las construcciones de Lego. Además, el hilo conductor, ese amarillo, sigue en la puerta del armario, metalizada y con rendijas.
Uno no sabe si está en una habitación infantil o un gimnasio de esos modernos que tanto están de moda; y es que, como vemos, este joven también posee cierto gusto por los deportes. Algo que queda reflejado también en uno de los laterales de la cama.
Habitaciones infantiles para jóvenes cerebritos
Fascinada me tienes este ambiente. Un éxito absoluto con los colores, que, además de dar más claridad a esta estancia (que cuenta con una ventana más pequeña que la anterior), crean un aspecto un poco nórdico. Y claro, una es fan absoluta de los ambientes escandinavos y no puede evitar enamorarse.
La estructura de la cama es muy llamativa, siguiendo el modelo que ya hemos visto en un montón de ocasiones, la típica fachada de casa que resguarda los sueños de nuestros hijos. No obstante, si hay algo que llame poderosamente mi atención es como se ha extendido el material (parece madera, pero podría ser aglomerado perfectamente) desde el cabezal hasta la puerta de entrada. Lo más “simpático” no es el uso de este material, es más bien la colocación de vinilos en negro que crean un gran esquema con las partes de un robot, el broche perfecto para la habitación de un pequeño enamorado del mundo de la robótica ¿verdad?
Como es de esperar, este niño contará con muchos juguetes y piezas pequeñas que querrá montar y desmontar. Sus padres se empeñarán más en el tema de guardarlas. Así, el espacio de almacenaje es muchísimo. Cuenta con una estantería con baldas al aire, pero también con un bonito armario empotrado que parece un gran archivador. En blanco, por supuesto, que ya sabemos que da más luz natural a las habitaciones.
+info: Yodezeen