La inspiración para la decoración infantil puede venir de muchas partes. Desde una revista de decoración, hasta un ambiente montado en una tienda. Y es precisamente lo que os traigo hoy. Un escaparate perfecto que me ha enamorado por completo. Un concepto creado por una marca portuguesa Le Petit Mool. Aviso, vas a querer copiar algunas de las ideas sí o sí.

Decoración infantil de diseño y funcional

Le Petit Mool es un concept sotre y estudio portugués en el que se valora un diseño y creatividad siempre cuidando la funcionalidad y la sostenibilidad. Por este motivo los materiales usados, como se puede apreciar, son materiales naturales y reciclados.

Podría hablaros de la filosofía de la marca y de su pasión por la decoración infantil, pero es algo más que evidente. La verdad es que me parece más llamativo resaltar los 42 m2 de concept store y estudio que no tienen ningún desperdicio. Un espacio multifuncional con varias áreas, en las que destaca la elegancia, la armonía y los detalles.

Es innegable el gusto por la madera, que se puede apreciar en cualquiera de los detalles de este espacio. Desde la cuna hasta las estanterías. Además, también incluyen otros elementos amaderados más vinculados al juego, como esa mágica cocina para los pequeños master chef hasta un puesto de helados que, sinceramente, me parece una verdadera maravilla.

No sólo la cuna hace acto de presencia. En Le Petit Mool saben que el crecimiento de nuestros hijos es imparable. Así pues, también reservan un espacio para la cama. El paso inevitable al crecimiento. Una cama, que, por cierto, sigue muy de cerca el concepto tatami.

Hay imprescindibles que ni este estudio, innovador y sorprendente, pueden dejar a un lado. Por ejemplo, los tipis. Pero, además, la inclusión de color se hace a través del textil. Sí, como en los ambientes nórdicos.

Muestras de color

Textiles de mil colores y estampados. Diferentes formas que siguen un patrón claro, tonos pastel y motivos decorativos geométricos. Al parecer, y aunque no veamos un ejemplo en las imágenes, el estudio no sólo se encarga de realizar diseños de muebles (que lo hacen genial), también crean sus propias telas estampadas e incluso papeles pintados.

Por último, y no por ello menos importante, es necesario destacar el color de las paredes y el ambiente en general. Es evidente que, en una tienda y un escaparate, el blanco ayuda a resaltar el resto de componentes, más si son de madera. No obstante, me sigue pareciendo un color muy adecuado para la habitación infantil, pues el blanco logra que la iluminación natural de la estancia aumente considerablemente.

Todas las imágenes pertenecen a Le Petit Mool