A nadie le gusta ir a una clínica dental, y si tenemos que llevar a los peques, el viaje ya se convierte en toda una odisea. Así que hemos encontrado la solución perfecta, y está basada en el diseño. Esta clínica dental de diseño, vista en Archdaily, tiene unos espacios modernos y bonitos, pero también funcionales y muy acogedores. La calidez es una de las cosas más importantes en una clínica, para evitar esa sensación de frialdad que suele acompañarlas, y aquí sin duda lo han conseguido.

El espacio es muy luminoso, con toques de madera que aportan calidez y la sensación de estar en un lugar hogareño y acogedor, y con zonas pensadas para el ocio mientras esperamos. Porque esas salas de espera frías y aburridas no nos dicen nada. Como saben que hacer esperar a los peques es lo más difícil, ellos tienen su propia zona de juegos, con un elefante que sirve de mesa o de silla y paredes de colores pastel que crean un mundo de fantasía.

En esta clínica hay espacios intercomunicados, y los adultos tienen también su zona de estar. Son espacios luminosos y claros, con tonos agradables y alegres, que hagan que nos olvidemos un poquito que nos encontramos en una clínica dental. Y el diseño se inspira también en el logo de la clínica, que tiene tonos naranjas y círculos.

En la zona de estar parece que nos encontramos como en casa. Un espacio que ha robado muchas ideas del estilo nórdico, y que realmente no parece una sala de espera. Plantas, una gran mesa con sillas y una zona para el café. De esta forma las esperas se hacen más cortas, y los que se encuentran en la sala pueden entablar conversación más fácilmente. Esta es una bonita forma de humanizar los espacios recurriendo al diseño, tal y como hemos visto en algunas plantas infantiles de diseño de hospitales.

 

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